21 de junio, Día Internacional del Sol

El próximo 21 de junio se celebra el Día Internacional del Sol, una conmemoración elegida por las asociaciones ecologistas para defender las energías renovables y la gratuidad y universalidad del Astro Rey. La fecha coincide con el solsticio de verano, el día en el que disfrutamos del Sol durante más horas.

El Día Internacional del Sol cobra especial relevancia en España, donde el propio Sol está amenazado por una serie de medidas para defender el sistema obsoleto de las energías convencionales y condenar a las renovables. Las nuevas leyes que plantea el gobierno quieren limitar el autoconsumo, que posibilita a sus usuarios el abandono de la red convencional.

Las intenciones del ejecutivo español pasan por encarecer las inversiones y el aprovechamiento de las energías alternativas, de forma que una familia que quiera autoabastecerse con la energía ilimitada y gratuita del Sol, tenga tantas dificultades para lograrlo que abandone sus intenciones antes siquiera de empezar y no tenga más remedio que seguir utilizando la energía de las grandes operadoras.

Estas medidas no solo van en contra de la independencia de los individuos o del objetivo de que las actividades humanas sean más respetuosas con el medio ambiente, sino también del progreso científico. La ciencia consigue avances como la batería Tesla de iones de litio, similar a la batería de un teléfono móvil o un coche eléctrico, que puede ser utilizada en una casa a un precio razonable para aprovechar al máximo la energía del Sol.

España es un privilegiado en Europa, ya que disfruta de un clima idóneo para el fomento de la energía solar. Si consultamos los datos de la Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) para la estación meteorológica del Aeropuerto de Madrid, por poner un ejemplo, vemos que, en el mes de julio, hay un índice de 354 horas de Sol, esto es, una media de 11,4 horas diarias. En tres meses del año se superan las 300 horas (10 al día) y, en otros cuatro, las 200.

Con tanto Sol, España debería estar a la cabeza en producción de energía solar, pero no es así. Alemania disfruta de menos de la mitad de horas de Sol que España, pero es líder en generación de energía solar fotovoltaica. La principal diferencia entre ambos países es que, mientras los germanos fomentan y apoyan las renovables, en España se gravan y se bloquean.

La energía solar es una realidad, ya es accesible para la población sin necesidad de primas y subvenciones, se puede amortizar y la electricidad producida puede competir en el mercado con las fuentes energéticas convencionales, siempre que no se le pongan trabas administrativas ni impuestos absurdos y se le deje crecer.

Pocas cosas hay en el planeta que unan a todos sus habitantes, pero una de ellas es el Sol, que calienta por igual a todos los seres humanos, a todos los seres vivos. En algunas regiones luce más intensamente, en otras permanece más horas, incluso en algunas solo aparece tímidamente y necesitan ingenios para verlo, pero de lo que no podemos dudar es de su universalidad, gratuidad y de que debemos aprovechar al máximo su potencial como suministrador de luz, calor y energía durante todos los días del año.